La Estrategia Nacional de Refuerzo Escolar busca mejorar el aprendizaje de los estudiantes de manera integral. Para lograrlo, se centra en dos aspectos fundamentales:
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Desarrollo de competencias para seguir aprendiendo: Se busca que los estudiantes no solo adquieran conocimientos, sino que también desarrollen habilidades y actitudes que les permitan continuar aprendiendo de manera autónoma a lo largo de su vida. Esto implica que aprendan a gestionar sus propios procesos de aprendizaje, estableciendo metas, identificando recursos y evaluando su propio progreso.
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Fortalecimiento de la autoestima: Se busca reforzar, recuperar o desarrollar la confianza en sí mismos de los estudiantes. Una autoestima saludable es fundamental para el aprendizaje, ya que influye en la motivación, la perseverancia y la capacidad para enfrentar desafíos. Al fortalecer la autoestima, se busca que los estudiantes se sientan capaces y seguros de sí mismos en su proceso de aprendizaje.
Para lograr estos objetivos, es importante brindar un soporte socioemocional adecuado a las necesidades de cada estudiante. Esto implica estar atentos a sus emociones, ofrecerles un ambiente seguro y de confianza, y proporcionarles herramientas para gestionar el estrés y las dificultades emocionales que puedan surgir durante el proceso de aprendizaje.