Cartilla sobre Convivencia Escolar 2024

I. Normas de convivencia: pautas para una comunidad escolar armoniosa

Las normas de convivencia son herramientas esenciales para fomentar una convivencia escolar democrática. Estas pautas de comportamiento, junto a medidas correctivas justas, permiten crear un ambiente donde se aprende y se practica la responsabilidad, la solidaridad, el respeto y la ciudadanía.

A. Construyendo ciudadanía desde las relaciones:

Las normas de convivencia van más allá de simples reglas. Son la base para que las y los estudiantes, a través de sus interacciones diarias, construyan experiencias de aprendizaje relacionadas con la participación ciudadana, la responsabilidad individual y colectiva, la solidaridad y el respeto por la autoridad y las leyes.

B. Pautas de comportamiento basadas en valores:

Las normas de convivencia se basan en un conjunto de valores, actitudes, acciones y prácticas que la comunidad educativa espera de todos sus integrantes. Estos valores se traducen en pautas de comportamiento específicas que guían las interacciones en el ámbito escolar.

C. Medidas correctivas: fortaleciendo la autorregulación:

Las medidas correctivas o reguladoras no son castigos. Son acciones disciplinarias que buscan gestionar los comportamientos disruptivos de las y los estudiantes, siempre con respeto a su edad, nivel de desarrollo, dignidad y derechos. El objetivo final es fortalecer su capacidad de autorregulación y promover la reflexión sobre sus acciones.

Características para una aplicación efectiva:

Las normas de convivencia son más efectivas cuando son claras, comprensibles y fáciles de aplicar. Para ello, deben ser:

  • Universales: Aplicables a todas las personas que forman parte del entorno escolar.
  • Redactadas en lenguaje sencillo: En primera persona del plural (“nosotros”) y con un lenguaje claro y sencillo para facilitar su comprensión.
  • Propositivas: Describen el comportamiento deseado de forma positiva, en lugar de centrarse en lo que no se debe hacer.
  • Concisas: Pocas y fáciles de recordar y cumplir.
  • Adaptables: Adecuadas a cualquier etapa del desarrollo de las personas.

II. Medidas correctivas o reguladoras: herramientas para la formación

Es natural que, durante el proceso formativo, las y los estudiantes puedan incumplir las normas de convivencia en ocasiones. Influenciados por sus experiencias y emociones, pueden mostrar comportamientos disruptivos que afectan el desarrollo de las clases y la convivencia en general.

Ante estas situaciones, es fundamental la intervención oportuna de los adultos a través de medidas correctivas o reguladoras. Estas medidas deben:

  • Ser justas y proporcionales: Basarse en la gravedad de la falta y el contexto en que se produce.
  • Tener un enfoque educativo: Buscar la reflexión y el aprendizaje del estudiante, no solo la sanción.
  • Ser aplicadas de forma coherente y consistente: Todos los estudiantes deben recibir el mismo trato ante situaciones similares.
  • Promover la reparación del daño: Ayudar al estudiante a reparar el daño causado por su comportamiento.
  • Involucrar a la familia y/o comunidad educativa: Buscar el apoyo y la colaboración de la familia y/o comunidad educativa en el proceso de formación del estudiante.

III. Protección de estudiantes: un compromiso de la comunidad

La protección de los estudiantes frente a situaciones de vulneración de derechos es un compromiso fundamental de la comunidad educativa. Para ello, es necesario identificar las situaciones de riesgo que pueden afectar a los niños, niñas y adolescentes (NNA) en el espacio escolar y en su entorno familiar y social.

Situaciones de riesgo a tener en cuenta:

  • Riesgo o desprotección familiar: Negligencia, abandono, violencia intrafamiliar, etc.
  • Riesgo de violencia reincidente: Situaciones en las que el NNA ha sido víctima de violencia y existe riesgo de que vuelva a ocurrir.
  • Riesgo de sufrir accidentes: Infraestructura local insegura, falta de supervisión, etc.
  • Exposición a contenidos inapropiados: Lugares, contenidos, productos y/o servicios no aptos para NNA en la localidad.

La identificación y atención oportuna de estas situaciones de riesgo es fundamental para proteger a los NNA y garantizar su pleno desarrollo en un entorno seguro y saludable.

Es importante recordar que este es un resumen. Para una información completa y detallada, consulte el documento original.

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